Rápidos y Furiosos 5in control

Rápidos y Furiosos 5in control / Fast Five

Director: Justin Lin.

Actores: Paul Walker, Vin Diesel, Dwayne Johnson, Jordana Brewster, Tyrese Gibson.

Origen y año: Estados Unidos 2011.

Duración: 130 minutos. Apta mayores de 13 años.

Estreno en Buenos Aires: 05 de Mayo 2011.

Crítica: No soy ni seré fanático de Rápidos y Furiosos nunca en absoluto. Tampoco me interesaban ir a verlas cuando aparecían en cartelera, ni tampoco siquiera cuando veía las primeras por televisión. En una escena de la película, la banda de R y F deciden ir a buscar coches "invisibles", y van: allí tras caer en una calle con rejas cortas y bajas cuatro de ellos saltan hacia un estacionamiento donde encuentran distintos coches policías, unos segundos después vemos tres coches de esos y Brian O'conner (Paul Walker), Dom Toretto (Vin Diesel), Han (Sung Kang) y Roman (Tyrese Gibson) se ponen a hablar, ambos con los cuatro coches derechos en la misma posición de sus ventanillas, de alguna manera hablan de algo, a Roman le preguntan por que tardó tanto en llegar, O'conner le tira un chiste y riéndose pero enojadamente Roman le contesta "Muy gracioso". Muy gracioso, significa de alguna manera, o en como Roman lo dice, gracias por tirar ese chiste, pero acá soy yo quien mejor los cuenta. Vale decir, que con ese "Muy gracioso" la gente en la sala se rió, no tanto, pero algunas risas se escucharon. Esa escena no marca, no vale ni hace perder nada, pero en algún sentido sí. Ellos están en Río de Janeiro, y secuestran cuatro coches de policías, empiezan a correr en picadas para ver quién gana: finalmente termina siendo O'conner quien gana, pero de alguna otra forma nos quedamos con la frase del negro "Toretto te dejó ganar".

Son ellos. Aunque por momentos (la primera media hora), se necesita empezar de alguna forma: así empieza Rápidos y Furiosos 5in control -muy discutido el nombre, ¿no sería mejor 5ntrol?, ¿o el 5 representa la letra S?-, Toretto queda libre gracias a su hermana y su cuñado que le salvan el pellejo tras estar siendo trasladado a otro cárcel. Tanto O'conner como su mujer Mía (Jordana Brewster) viajan a Río de Janeiro por un trabajo que les encarga Vince (Matt Schulze). Ese trabajo tendrá destino en un tren que los llevará al encuentro con Toretto y allí empezar la realidad, o mejor dicho, la primera escena de autos y acción de la quinta película de la saga. Ellos están sólo, no se esconden, ellos nunca se esconden, pero sí se cuidan, se refugian, tiene un auto importante que contiene un chip dentro.

Después de eso pasan millones de escenas con diálogos, que incluye una de acción por las fabelas, y el momento en que Mía le dice a O'conner que van a ser padres, y ellos junto a Toretto se abrazan celebrando la familia unita. Lo mejor, o la fiesta todavía no arranca, los actores parecen decirnos que esperemos con sus miradas, todo parece estar en espera, mientras Hobbs (The rock Johnson) también aparece sabiendo que después se encontraran cara a cara. Las películas de auto de alguna forma, siempre tienen algo de música y fiesta. Lo muestra en la escena donde el dúo dinámico O'conner-Toretto sale a ganarse uno en medio de una ruta de Río. Cabe destacar que además de llevarse una ferrari celeste hermosa, luego volverán allí con un plan y preparados, como para que Hobbs valla, y terminen cara a cara, y con una frase importante en la película "Esto es Brasil, Estás muy lejos de casa" y todos apuntando a los del grupo de Hobbs. Ellos terminan cara a cara y Hobbs todo traspirado y con la barba a punto caer de lo enojado que parecía estar.

La fiesta empieza una vez que ellos reúnen gente para preparar el plan: dato, en esto no faltan las vueltas de tuerca. La fiesta se ve claramente, ellos refugiados en un lugar abandonado con forma de estacionamiento, y allí es donde se alojan. Los chistes abundan: el gran Tyrese Gibson siempre rompiéndola remata amenazando que no le gusta el plan, pero en cuanto le dicen el dinero que ganaran parece arrepentirse y trabajando excelentemente el chiste con los gestos y la cara. Allí siempre está -hablando de gestos y miradas- Vin Diesel, un gran actor, pero que lamentablemente sirve particularmente para estos papeles. Papeles, que a veces lo exageran en canchero, pero que termina siendo una motivación positiva para el público. Chistes que se ven, cada uno tiene un laburo, hay dos que parecen hablar cubano -uno de ellos es Don Omar, que después diré algo mas de él- que tienen como misión entrar a un baño todo cagado y romper la pared.

Es cierto, Rápidos y furiosos muestra una placa que pocas veces había mostrado en las anteriores: poco importa que va a pasar con los personajes, ya que sabemos que todo saldrá bien, lo único que entusiasma es seguir divirtiéndonos con las escenas de acción y esperar algún que otro gran chiste. No sufrimos por lo que pasa con nuestros héroes automovilísticos, por que de alguna o otra forma, la película intenta seguir mostrando su verdadera faceta: entretener al público.

Mas de algún fanático de la saga, se debe quejar seguramente por la falta de lo que mostraba la verdadera película: las carreras de auto, que de alguna manera, metidas en una película no parecía satisfacer demasiado. Esta tiene otra cosa, además de tener un par de carreras, muestra distintos autos importantes, el director Justin Lin construye de manera exitosa a sus personajes, muestra impecablemente los lugares de Río de Janeiro -aunque mostrar dos veces al Corcovado parece exagerado, además de en una calle mostrar la bandera del país,o sea no hace falta mostrar eso para que nos demos cuenta de que es Brasil-.

Rápidos y Furiosos 5in control, termina siendo una película, una grata sorpresa, una aventura por Río de Janeiro, a disfrutar de tiros, autos y corridas impecables, aquellas que muestran el mejor cine de acción y lo que realmente vale el precio de la entrada. Rápidos y Furiosos 5 además es vivir una fiesta, vuelve a mostrar la modernidad, y además menciona la importancia de Brasil para las películas norteamericanas -Hace poco estrenaron Río-. Allí aparece Don Omar, y una vez que veamos la escenas mas importante de la película, que recuerda los mejores momentos del cine de acción como en La gran Estafa, y hace poco Atracción peligrosa, tendremos lugar al aplauso del público hacia la escenas mas top de la película: la que aparece Don Omar con su tema Danza Kuduro, y todos mirando en cámara lenta la plata que le habían robado al narcotraficante mas grande del Brasil. Luego queda tiempo para ver que hacen cada uno de ellos luego de ese trabajito, aunque nos damos cuenta de que habrá sexta película, ya que en una yapa luego de los títulos aparece Eva Mendes en un diálogo con Hobbs que nos da a entender eso.

Rápidos y Furiosos, la banda se va a Brasil y allí transforman y mezclan la acción con la comedia y aventura: no importan los personajes, no importa la plata, no importa su historia y por momentos la película tiene poco para hablar, sólo hay que sentarse en la butaca y empezar a disfrutarla, siendo fanático o no. Si es fanático ya sabe lo que está viendo, si no lo es, está ante una gran película de acción, que por si no sabe, parece la mejorcita de toda la saga. Rápido y Furioso termina siendo festejado por todos, aunque sea se llevaron la guita y nos pusieron un tema que va acorde con el triunfo de la banda que viajó a Río de Janeiro. Río de Janeiro, la ciudad que ellos solos destruyeron.