Estas son las quince (15) películas que no entraron en la lista de las diez (10) mejores, pero que igualmente, son todas muy buenas. Mi conciencia me dice ¡Si!, pero yo digo ¡No! sobre algunos cambios.
8 minutos antes de morir: Una película genial, rápida, muy inteligente. Esa película que nos lleva al cine de los pelos, que nos arrastra hasta llegar a la sala como un fantasma y que al salir de ella ni nos acordamos que día era hoy. Gyllenhall corriendo en el tiempo, un tren hermoso y mucho misterio. No se pierda a Vera Farmiga en una de las pocas veces que la vimos este año.
Atrapada: John Carpenter pisa el palito pero demuestra por que es una gloria para el cine de terror. Para los que lo atacan, fijense el año en materia de terror que tuvimos, después hablamos.
Damas en guerra: Comedia hermosa, sobre la amistad entre las mujeres. Clase de como insulta una mujer, clase de como hacer reír en el cine, clase de como valorar una película. Clase de como armar un grupo de minas geniales.
De caravana: Locura cordobesa que quería estar en la lista, pero que no va a estar. Querer secuestrar a la Mona Jimenez es tan genial como el mismo significado. ¿Que carajo es eso? Aguante Córdoba!.
El cisne negro: Locura desenfrenada. Sin dudas, una de las películas que mas me pegó del año. De las que mas disfrute y la cual quería ver devuelta ni bien había salido de esa sala oscura.
Gigantes de acero: Rocky con robots. El señor boxeador deja los guantes para dárselos a la máquina. Confía en su hijo y gana. Esa cosquilla llamada "emoción" saca varios puntos.
La noche del demonio: La película que mas disfrute en el cine este año. Terror por donde se lo mire y un final donde me fui triste, por que quería ver mas y mas.
Pase libre: Volvieron los hermanos Farrelly (¿Alguna vez se habían ido?). Está Owen Wilson. Hay minas, hay joda. Hay hombres fracasando. Hay de todo en una comedia disparatada.
¿Que pasó ayer? Parte 2: Es un poco menos que la primera. Pero hay algo que rescato mas que aquella: la "joda" y la "fiesta" está mas asegurada. Hay alcohol en el medio de la playa, hay un tatuaje de, hay verduras, hay chinos, hay mentiras, hay de todas, pero lamentablemente la fórmula parece ser parecida a la de la primera. Igual, está claro que Phillips tendría que rebautizar el nombre, ya que lo que pasó ayer va a ser siempre lo mismo.
Quiero matar a mi jefe: Película llena de personajes grandiosos (además de actores). Hay chistes por todos lados. ¿Qué mas se puede pedir?. Está Jennifer Aniston de dentista, che.
Scream 4: La de terror que se burla de las demás. Wes Craven no es ningún ignorante y sabe bien de que está hecho el terror. Les tira un tortazo en la cara a todas las tripas y juega con eso: cuchillazo por acá, cuchillazo por allá y da vueltas de tuerca triunfantes.
Imparable: Tony Scott vuelve a jugar con las máquinas y las hace trabajar. Pero no se olvida de que su mayor "objeto" son los actores; y para ello allí estan dos héroes: Denzel Washington y Chris Pine.
Fase 7: Película bizarra presentada en el Festival de Mar del plata. Genialidad, en una película misteriosa que nunca da pistas sobre su final ni sobre el rumbo de sus personajes.
Destino Final 5: Otra mas de la serie. Esta es mas para la comedia, es mas para los chiches, es mas para los litros de sangre sobre los anteojos. Es mas entretenida.
127 horas: James Franco debía estar. Algo me dice que es una película rara, pero me gusta. Boyle me hace sentir sin oxígeno.
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